El pasado 19 de febrero tuvimos en la sala de estar del Club una interesante charla para los padres de socios y amigos sobre la era digital que nos ha tocado vivir.
Previamente saboreamos un esplendido arroz “de pobre” cocinado por José María, padre de uno de los chicos. El día salió lluvioso y con la ayuda de todos acondicionamos la sala de estudio y aledaños para comer a cubierto.
La charla coloquio la impartió Don Tomás Baviera, profesor de Marketing en el Politécnico de Valencia y experto en redes sociales. Inició la charla comentando las estadísticas estudiadas por la socióloga Jean M. Twenge de la Universidad de San Diego. Desde 2011 venía observando un cambio de tendencia en los jóvenes que se suele dar en situaciones de grandes crisis. Dando vueltas a la situación descubrió que tal generación había pasado más del 50 por cien de su tiempo en las redes sociales. Precisamente con la aparición del iphone, hace 15 años, es cuando se da el salto generalizado a las redes sociales, dado que con los smartphone previos no era posible.
Las características que apreciaba en esa generación, (llamada Igen, I de iphone y gen de generación) eran tales como retrasar las bebidas alcohólicas, o dejar para más adelante el carnet de conducir, pues estaban ocupados en el mundo digital. Pero lo más preocupante era ver una mayor tendencia a tener problemas de salud mental, especialmente en las chicas. Con el uso de las redes sociales, esta generación tendía a aislarse y a interactuar con los demás solo por internet.
La autora del libro “Igen”, de Jean M. Twenge, sugiere que el móvil hay que sacarlo de las habitaciones de los hijos, no solo por el tiempo que les roba, también por la dependencia a mensajes que llegan por la noche impidiendo el descanso, siendo la falta de sueño una de las principales causas de trastornos mentales.
El profesor Baviera comentó como las redes sociales están diseñadas para crear adicción al usuario, buscan captarle cuanto más tiempo mejor. Al fin y al cabo las redes cobrarán a los anunciantes según el público que disponga. Apuntaba que una cadena de Tv de un país puede tener 5 o 6 millones de tele-espectadores, pero tales redes llegan a tener 200 millones de usuarios, así pues, las cantidades económicas que se mueven son enormes.
Señalaba el profesor como facebook y otras redes consiguen no solo remitir al usuario información que cuelgan sus contactos, con el avance tecnológico descubren aquellas cuestiones que son de interés personal y bien de los propios contactos o de cualquier otro, van mandando imágenes, videos etc. muy atractivos e interesantes para el usuario, con lo que la dependencia/adicción está servida.
Como solución a este gran problema de educación, el profesor Baviera proponía las alternativas saludables; disfrutar de una salida al campo, hacer deporte con los hijos, interactuar con ellos en juegos, etc. Comentó que prohibir tiene poco futuro en esta cuestión.
Hizo hincapié en el consumo de buenas historias que hagan frente a las historias vacías de contendido y de sabor, que presentan las redes sociales, por supuesto, la afición a la lectura es un gran salto para conocer las historias que educan y enseñan.
Ya casi finalizando la sesión, respondiendo a preguntas de padres comentó la falta de atención que provoca el uso indiscriminado de las redes sociales, dificultando enormemente la concentración en el estudio y la atención en las clases. Llegó a decir que en gran medida los resultados académicos no están tanto en función de las capacidades como del grado de atención que disponen los alumnos.
Por último recomendó el libro “La restauración de la cultura cristiana” de Jhon Senior, en cuyo relato cuenta el éxito de unos profesores universitarios que presentaron a sus alumnos unas alternativas saludables a la tecnología capaces de abrir nuevos horizontes en la vida.